El PP pide rechazar la agresión a policías y romper con los partidos que no condenan la violencia

Zaragoza, 4 de noviembre de 2021.- No son admisibles las agresiones a los agentes de la autoridad pública, como la que tuvo lugar en Zaragoza a finales del pasado mes de octubre, y menos aún que determinados colectivos las justifiquen. Por eso esta tarde, en el pleno de las Cortes de Aragón, el diputado popular José Antonio Lagüens afirmó que “los atentados contra la autoridad y las lesiones causadas a nuestros policías deben cesar de inmediato y nunca deben quedar impunes”. El parlamentario defendió una proposición no de ley para reforzar y desplegar protocolos de colaboración con las comunidades autónomas y los ayuntamientos para evitar los actos de violencia contra las fuerzas y cuerpos de seguridad, también planteó la investigación y sanción de estos actos, además apeló a modificar la legislación para reforzar el principio de autoridad y, por último, pidió romper cualquier colaboración o pacto político con los partidos o grupos que no condenen la violencia contra los cuerpos policiales.

La Cámara apoyó por unanimidad tres de los cinco puntos votados, pero PSOE, Podemos, CHA y PAR rechazaron apoyar el refuerzo al principio de autoridad de los agentes o romper y condenar cualquier colaboración o pacto político con los partidos o grupos que no condenen la violencia contra las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, “hay dificultades en este Parlamento para condenar y romper con aquellos partidos y agrupaciones que practican la violencia, la justifican y hacen apología de la misma” lamentó Lagüens, en clara referencia a Podemos por amparar y defender a sus cargos condenados judicialmente por atentar contra la policía.

“Debemos condenarlo señorías, y además es una amenaza para los derechos y libertades y el sistema de convivencia que nos dimos todos los españoles”, explicó, que consideró obligado “visibilizar, una vez más, el buen trabajo que hace la policía y todas las fuerzas y cuerpos de seguridad, incluso fuera de servicio como los últimos casos acaecidos en Zaragoza que engrosa el dato preocupante y revelador de que los casos de atentados a agentes de la autoridad se han incrementado en los últimos años entre un 20 y un 25%”.

Bajo la premisa de que “atacar a las fuerzas y cuerpos de seguridad es atacar a los ciudadanos”, Lagüens significó que esas agresiones también supone contravenir los derechos y libertades, atentar contra la garantía de la protección que ampara a cualquier español y, además, a la integridad física y moral de las personas. La respuesta, apuntó, “adoptar medidas para reforzar el carácter y principio de autoridad de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y además una condena expresa para quienes pactan con ellos”.