Le culpa de “dejar en el andén” a muchos aragoneses y desvertebrar el territorio
Zaragoza, 25 de marzo de 2021.- Contundente fue en su intervención ante el pleno del Parlamento autonómico Joaquín Juste a la hora de pedir explicaciones al Gobierno de Aragón sobre la amenaza de dejar sin servicio ferroviario a los usuarios de las líneas Teruel-Caudiel (Valencia), Huesca-Jaca, Caspe-Fayón y Zaragoza-Lérida. “Señor consejero, en vez de cerrar líneas o suspender servicios quizás deberíamos intentar programar horarios, trenes competitivos que resulten atractivos para los viajeros, conseguir de esa forma viabilidad para esas líneas, estimulando su uso, dando un buen servicio en vez de dejarlas morir o suspenderlas ¿No han pensado en esto antes de tomar soluciones drásticas de cierre?”, interpeló el diputado popular al responsable de Vertebración del Territorio del Ejecutivo autonómico.
La colaboración para la prestación de determinados servicios ferroviarios procede de la década de los noventa con la firma de un convenio entre la Comunidad Autónoma de Aragón y la Administración General del Estado, al igual que ahora ambas con responsabilidad de gobierno del Partido Socialista, y desde entonces y con la introducción de varias modificaciones las diferentes administraciones lo han mantenido para asegurar un servicio público.
HAY ALTERNATIVA
Las alternativas al cierre anunciado por Soro se las ofreció el propio Juste, “que siga pagando esos servicios o presione a sus socios, los del Partido Socialista, para que se declaren como servicio básico público y que al final Teruel-Caudiel, Huesca-Jaca, Caspe-Fayón, Zaragoza-Lérida se siga manteniendo, sigamos manteniendo esos servicios, que la gente los pueda utilizar”, sobre todo cuando el presupuesto autonómico recoge en 2021 una partida para pagar esas líneas. Como plan B el Partido Popular sugirió que teniendo en cuenta que “el Partido Socialista gobierna en España, a través del señor Pedro Sánchez y gobierna en Aragón a través del señor Javier Lambán, no nos cuenten historias, hablen, póngase de acuerdo. Que estos trenes sean declarados de obligación de servicio público por parte de la administración central del Estado”.
No son nuevos los cambios de criterio sobre un mismo tema en la práctica política del titular del departamento, como le recriminó el diputado popular cuando le recordó que llegó a calificar a estos servicios ferroviarios como “muy necesarios para Aragón desde el punto de vista de vertebración del territorio y de la cohesión social” durante la firma con Renfe de la renovación del contrato para, ahora, remitir una carta al presidente de ese organismo comunicando la intención del Gobierno autonómico de no seguir costeando determinadas líneas regionales deficitarias. “A qué consejero nos creemos, al que considera fundamental estos servicios y pone toda la carne en el asador para mantenerlos o al que decide limitar los servicios públicos de los aragoneses y cerrar estas líneas”, dijo Juste a Soro, “poco le ha durado a usted el interés por garantizar el derecho al transporte a todos los ciudadanos aragoneses”.
Tampoco es asumible, defendió el diputado popular para resumir su posición, que sin ofrecer una solución alternativa y sin negociación previa con el Ministerio de Movilidad, se suspenda unilateralmente la financiación de estos trenes “dejando en el andén a muchos aragoneses y desvertebrando el territorio. La solución no puede ser cerrar las líneas, dejar a la gente sin servicio y sálvese quien pueda. Si solo se les ocurre esto para arreglar el problema más vale que se marchen”, en una clara reclamación al consejero de Vertebración del Territorio de mínima competencia en la ejecución de la responsabilidad institucional encomendada.
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