Susín alerta de las afecciones negativas de unas Cuentas ficticias, como en 2021

Zaragoza, 15 de noviembre de 2021.- Es muy difícil hacer creíbles unas Cuentas de la comunidad autónoma cuando el punto de partida es irreal. Esta es la idea que hoy por la mañana, en la Comisión de Hacienda de las Cortes de Aragón que iniciaba la ronda de comparecencias presupuestarias del Gobierno, trasladó la portavoz popular en esta área, Carmen Susín, para señalar que con una previsión de ingresos demasiado optimista y una relación de gastos excesivamente contenida el proyecto del Gobierno resulta ficticio. De hecho, PSOE, Podemos, CHA y PAR calcan para 2022 un modus operandi que han convertido en tradición pero cuyos resultados finales siempre han conducido al aumento continuado de la deuda pública y al incumplimiento sistemático del déficit.

El presupuesto, trasladó Susín en su intervención, “se basa en unas previsiones de crecimiento del 7,1% (del PIB) que como le dijimos en el debate del techo de gasto nadie avala, ni la AIRef ni el BBV ni Funcas, en el que disminuyen las aportaciones del Estado y prevé un incremento de la recaudación en tributos propios y cedidos del 7,4%, y en tasas, precios públicos, cánones y arrendamientos un crecimiento del 9,2%, desoyendo las afecciones sobre Aragón de la inestabilidad económica y la afección de la crisis del covid manteniéndose esa disneylandia que nos pintaba el jueves el señor Lambán”.

No es la primera vez, afirmó la diputada, que recordó cómo para el presente ejercicio el Gobierno aragonés elaboró su presupuesto con una previsión de crecimiento del PIB entre el 8,37% y el 10,99%. Hoy, varios informes ya desmienten al Ejecutivo y rebajan notablemente su expectativa al 5,6% lo que llevó a la diputada popular a alertar de la repetición de las consecuencias negativas para 2022, “!a deuda se sigue incrementando, que la recaudación es menor que la prevista, que somos la comunidad autónoma que peor y más tarde paga a sus proveedores, que han despedido ustedes a más de 2.000 trabajadores necesarios para afrontar las listas de espera después de la covid porque no pueden pagarles, y que el tejido económico aragonés es el único que sigue sin cobrar las ayudas de toda España”

El incremento de la deuda pública, hasta superar los 9.200 millones de euros según las estimaciones del Ejecutivo, no es un tema menor y de poco sirve compararse con otras comunidades autónomas porque “supone que cada aragonés, el 31 de diciembre de 2022, deberemos más de 7.000 euros por cabeza. Y esto, señor consejero, cuando han tenido ustedes en dos años más de 1.600 millones de euros extra de financiación para hacer frente a la crisis del covid”, matizó la diputada.

Para continuar con el contrapunto real al entusiasmo presupuestario de la coalición, Carmen Susín señaló que “disminuye el presupuesto destinado a Justicia en un 2,02%, a las Administraciones comarcales un 1,63% de su presupuesto y todavía no han recuperado los niveles de 2019. Carreteras y Transportes disminuye a un 4,14%” entre otras minoraciones como las políticas dirigidas a desarrollo económico con una bajada en su financiación de casi el 5%, una reducción en políticas de empleo de más del 1%, investigación recoge un descenso del 11%, el fondo de solidaridad cae un 23,58% y las prestaciones asistenciales y servicios sociales un 5%, según el proyecto legislativo enviado por el Ejecutivo al Parlamento.

Otras carencias de partida desveladas por Carmen Susín son la infradotación presupuestaria para pagar la totalidad de las nóminas o la ausencia de consignación para cumplir con la subida salarial del 2% que corresponde a los funcionarios de la Administración autonómica y que el Gobierno afrontará, aunque no lo reconozca, con la “inejecución presupuestaria, fundamentalmente de las inversiones y de la deuda como siempre y del despido de 2.400 trabajadores de la sanidad pública necesarios para hacer frente a las listas de espera, porque a ustedes pese a su discurso sobre la sanidad pública les gusta más derivar a la privada que les sale más barato. Eso sí, gritando más alto que defienden la sanidad pública para que no se note mucho las derivaciones a la privada”.