Vaquero administra una dosis de realidad al Gobierno

Zaragoza, 19 de noviembre de 2021.- Nueva dosis de realidad del Partido Popular al Gobierno de Aragón a cuenta de las propuestas de resolución en el debate de política general sobre el estado de la Comunidad celebrado esta mañana en el Parlamento. La creciente subida de la factura de la luz, el importante incremento del coste de la gasolina, el sustancial aumento del precio del gas o el crecimiento del IPC son hechos concretos que la portavoz adjunta y de Institucional del Partido Popular, Mar Vaquero, destacó en su intervención como realidades incontestables que PSOE, Podemos, CHA y PAR deliberadamente han preferido obviar en su análisis sobre el estado actual de Aragón.

Una situación general de empeoramiento en la comunidad autónoma, insisten los populares, que el Ejecutivo aragonés tiende a esconder en su discurso, a “los casi 64.000 desempleados, los más de 5.000 trabajadores que siguen en ERTE, de las 6.000 empresas que han cerrado, de los 25.000 aragoneses que en estos momentos cuelgan de un hilo del sector de la automoción, de los 12.000 aragoneses que están en las filas del hambre, 6.000 se han incorporado en el año anterior”, apuntaló Vaquero con otros datos como el 18% de la población aragonesa situada en riesgo de pobreza o las 40.000 solicitudes presentadas al Ingreso Mínimo Vital (IMV) de las que más de la mitad han sido rechazadas.

En definitiva, falta de realismo respecto al alcance de la crisis económica y social, ausencia de sensibilidad con los aragoneses en situación de vulnerabilidad y, no menos relevante, incapacidad para compatibilizar el cumplimiento de la ley y de los derechos fundamentales con la protección de la salud son, resumió Vaquero, las tres quiebras fundamentales del Gobierno aragonés durante el ejercicio político objeto del debate del estado de la Comunidad.

LO QUE PSOE, PODEMOS, CHA Y PAR HAN RECHAZADO

En la parte de su intervención destinada a la defensa de sus iniciativas la diputada insistió en el carácter de impulso de las propuestas populares para compensar la baja intensidad de la actividad del Gobierno en el estímulo a la recuperación económica regional y para garantizar los niveles de cobertura social previos a la pandemia, “nuestras propuestas de resolución, treinta y siete, son unas propuestas que van dirigidas a mostrar un presente y un futuro que es del que se olvidó y al que renunció el presidente Lambán en su debate”, explicó, que además definió como “líneas estratégicas de un proyecto alternativo” y “un compromiso con los olvidados” dirigidas a “contrarrestar la incapacidad para gestionar el día a día de este Gobierno, de la propaganda y los anuncios”.

Sólo seis de las treinta y siete propuestas de resolución presentadas por el Partido Popular fueron finalmente aprobadas, lo que evidencia la nula voluntad de PSOE, Podemos, CHA y PAR por alcanzar acuerdos salvo que sean los que ellos proponen, lamentó Mar Vaquero, “el que ustedes rechacen más del 80% de las propuestas de resolución del Partido Popular que tienen que ver mucho con las aspiraciones con las necesidades y con los deseos de los aragoneses, lo que consiguen es no que estén rechazando al Partido Popular, si no que cada vez ustedes hagan una fractura más grande con la sociedad aragonesa”.

En la parte de ampliación y mejora de la calidad de unos servicios públicos mermados por la ineficacia del Gobierno autonómico frente a la pandemia, el Partido Popular consideraba obligado que tras la responsabilidad, compromiso y esfuerzo demostrado por la sociedad aragonesa durante la pandemia, el Gobierno de Aragón debía presentar una ley de Apoyo a las Familias para mejorar la relación de la Administración regional con las familias aragonesas.

Para progresar en esa relación beneficiosa para el bienestar de los ciudadanos también era necesario desatascar, y así constaba en el texto defendido por los populares, proyectos sanitarios concretos y fundamentales para la asistencia en el territorio como son la construcción de un nuevo centro de salud en Barbastro, la creación de una UCI en el Hospital de Alcañiz, la instalación de la Unidad de Radioterapia en el Hospital San José de Teruel o la rehabilitación y ampliación del Hospital Ernest Lluch en Calatayud.

También en la parte asistencial proponía el Partido Popular girar la atención a la dependencia hacia el refuerzo de las prestaciones vinculadas al servicio, disminuir los tiempos de espera y fortalecer los centros residenciales o, en el caso de las personas con discapacidad, desplegar en toda su extensión la ley de Derechos y Garantías que les ampara desde el año 2019 pero aún limitada en su desarrollo.

Entre las propuestas rechazadas en la parte de Educación, como otro de los pilares de competencia autonómica, los populares proponían al Ejecutivo dejar de influir en los derechos de universalidad, gratuidad y libertad en la educación pública y planteaban ampliar la oferta educativa en Aragón hacia la pluralidad y la autonomía de las familias para la elección de centro educativo.

Atención especializada al emprendimiento y a los autónomos aragoneses como parte sustancial del tejido productivo regional pero también como generadores de empleo estable, diseño de un programa contra la precariedad laboral y ayudas institucionales para soportar los altos costes energéticos que sufren las empresas fueron otras de las iniciativas defendidas por el Partido Popular.

En el ámbito económico pero concretado en el sector primario, fundamental para el mantenimiento de la actividad productiva en los pequeños municipios, los populares proponían aumentar el soporte institucional a los productos agroalimentarios aragoneses y, como impulsor de la mejora de la competitividad, el apoyo decidido a los embalses para así incrementar los recursos de agua disponibles en el territorio.

Todas las iniciativas anteriores trabajaban, recordó Mar Vaquero, sobre la idea básica de bajar los impuestos en la comunidad autónoma para que los aragoneses, familias y empresas, dejaran de ser los grandes perjudicados del panorama fiscal español.